26 de Enero del 2014.

Un pequeño ensayo desde una visión histórica, jurídica y política del entorno de la sentencia de la Corte de La Haya.

LOS TORMENTOS DE BASADRE NOS ACECHAN!

“Por la celebración del día de Santa Rosa , se ordenó izar la bandera peruana. La noticia del izamiento se propago de boca en boca velozmente no solo en la ciudad sino también en el campo. Aquella mañana, cuando se elevaba la bandera tantos años proscritas en tierras tacneñas, vi lagrimas en muchos ojos y no faltaron gentes que se arrodillaron con religiosa unción”, es un relato personal de Jorge Basadre en 1925 describiendo el sentimiento oprimido y encadenado por la rebelión chilena al Tratado de Ancón(1883), la cual ordenaba después de 10 años realizar los plebiscitos al pueblo tacneño y ariqueño.

Ad portas del fallo de la Corte de la Haya, el pueblo peruano no sólo disputará una zona marítima sino que afrontará de nuevo su historia y reexaminará identidad. Luego de casi un siglo de conflictos limítrofes con los chilenos, después del infructuoso Tratado de Lima la cual cedimos Arica. Han surgido acuerdos pesqueros en la zona limítrofe en los años 50 y 60, la cual otorgaba un espacio común donde las embarcaciones chilenas y peruanas que naufragaban o se despistaban en el territorio opuesto, no debían ser multadas o retenidas por la autoridad correspondiente. La cual en definitiva no ha sido respetada por las autoridades chilenas que han venido explotando los recursos marineros y aún más grave, ha retenido a pescadores peruanos que han quedado varados, inclusive decomisando sus barcos.

LA VICTORIA MORAL

Desde la posición jurídica , los fundamentos principales chilenos son dos:1)Que los acuerdos pesqueros si deben ser considerados tratados, pues se fijaron los limites expresos.2) Que Chile ha ejercido una “posición de facto”(explotando, administrando, explorando,etc) por más de 50 años en esa área, a consentimiento de la autoridades peruanas( pruebas; textos escolares, tesis de juristas peruanos, discurso del presidente Fujimori, etc). Se quiere utilizar “la costumbre” del Derecho Internacional.

A pesar de estos argumentos jurídicos, la posición chilena se debilito considerablemente ante el fallo emitido por la misma Corte ante el conflicto Nicaragua- Colombia, la cual mantiene las mismas aristas: si acuerdos pesqueros deben ser considerados tratados limítrofes, si la posición de facto servía como criterio para adjudicarse un derecho.

La sentencia de La Haya, otorgó la razón a Nicaragua, a pesar de que Colombia tenía décadas explotando y explorando la zona marítima que se disputaban, y consideraron que los acuerdos de exploración a favor de Colombia no eran Tratados limítrofes; y se dispuso a utilizar el criterio o regla que se utiliza ante los casos donde no haya límites marítimos, el trazo de la “LINEA EQUIDISTANTE”.

Basado en la jurisprudencia y la “piconería” mostrado por las autoridades chilenas (acatamiento progresivo, filtración de la sentencia, fraude de los jueces) son avisoramientos de un fallo a favor del lado peruano.

NO SOMOS VIRGENES!

“Políticos incompetentes, pueblo sin identidad, luchas individuales, indiferencia a los problemas políticos, moral devastada” son palabras descritas por Jorge Basadre en una Antología”La Vida y la Historia”, donde describe los vaivenes de la disputa de los territorios de Arica y Tacna después de haberse cumplido el plazo para los plebiscitos.

"Los fantasmas basadrinos"

El fallo de la Haya no tiene nada de histórico, no tiene nada nuevo! Años atrás hemos dejado que un tercero decida nuestras disputas territoriales, después de haberse cumplido el plazo de los plebiscitos de la clausula tercera del Tratado de Ancón, las autoridades peruanas después de 20 años de incompetencia para reclamar el territorio de Arica y Tacna, recurre a un tercero para hacer cumplir el Tratado de Ancón, el llamado a decidir entonces fue el presidente de los Estados Unidos” Calvin Coolidge”.

Tras una vergonzosa defensa debido a que se solicito el cumplimiento de un tratado la cual ya había sido incumplida hace más de 30 años, la decisión del presidente en 1927 fue realizar los plebiscitos en el Tratado.

En aquel entonces el pueblo tacneño y arequipeño con un vigente fervor peruano, fueron sometidos por largos años a los mayores vejámenes a la identidad, se les prohibía izar banderas peruanas, cantar el himno nacional, la existencia de colegios peruanos, o cualquier manifestación de cultura peruana, mientras que día a día eran objetos de una violencia racial. Estos hombres miraron los plebiscitos como la llave de las cadenas chilenas que portaban día a día.

No está de más decir, que los plebiscitos no pudieron llevarse a cabo, como los mismos encargados norteamericanos lo dijeron ”las hostilidades del estado chileno no hace factible los plebiscitos”, el estado chileno realizó todo tipo de artimañas para no realizar los plebiscitos, pues sabían que según las encuestas previas el pueblo tacneño y ariqueño querían ser peruanos, así el estado hacinó a fieles peruano en Santiago y promovió motines para los encargados de los plebiscitos entre ellos Jorge Basadre.

Después de dos largos años y la incompetente política peruana, Chile desconoció el fallo del presidente Calvin Coolidge y propuso una negociación directa en 1929, la cual se culmino con la negociación Leguía- Figueroa en el Tratado de Lima de 1929.

NUESTRA SOMETIDA IDIOSINCRACIA

La posibilidad de un fallo favorable en La Haya son visibles así como el desacató de Chile ante la decisión, no nos sorprenda escuchar a Bachelet diciendo: “EL pueblo chileno por historia a ejercido soberanía en esta zona marítima, por 50 años el pueblo ha explotado, explorado, administrado con el consentimiento del estado peruano; así el fallo, tiene errores que contraviene los derechos que el pueblo chileno ha ejercido por tanto años. Por tal motivo no acataremos el fallo hasta que se realiza una aclaración a la sentencia, mientras tanto el estado chileno no acatará el fallo”

Un discurso a la colombiana, del presidente Santos, la cual ha provocado una cruda disputa política y territorial en la zona, Nicaragua otorga concesiones y compra barcos para el resguardo de la frontera, mientras que Colombia avecina con las mismas medidas y tratando de anular el fallo de la Haya.

El pasado asoma

Basadre llora,

su pueblo que vió,

no aprende de sus errores!